miércoles, 26 de diciembre de 2007

Año nuevo, año viejo.


Me hace mucha ilusión el cambio de año, este en particular me llena de emoción, no porque no me haya gustado el 2007, pero si estuvo difícil, en serio. Difícil porque he tenido que aprender a conocerme con una enfermedad que me cambió el ritmo. Tuve que detenerme y bajar mi velocidad y aprender a que puedo soltar cosas que no creía que pudiera soltar, como la universidad donde trabajé por 7 años y donde crecí tanto. Difícil porque he tenido dolores y molestias en mi cuerpo que antes no tenía, porque me he sentido muy cansada, porque ahora me cuesta trabajo despertarme por las mañanas. Difícil porque estoy aprendiendo a conocer los cambios por los que pasa mi sobrino y porque creo que le está doliendo crecer y hacerse adulto. Difícil porque creí que era más fácil. Pero he aprendido de mí, que tengo muchas ganas de hacer cosas, que soy una persona fuerte y que me alegra iniciar un nuevo año. Y le doy gracias al 2007 también porque me dió otras cosas muy buenas, ¡Adiós 2007 y bienvenido 2008!

lunes, 17 de diciembre de 2007

Estrellas.


Como que había olvidado sentir que quiero celebrar, recibir y dar regalos, disfrutar de mi gente y compartir este tiempo. No deja de darme nostalgia la ausencia de mi mamá. El próximo 21 de diciembre cumple 10 años que murió y no sé muy bien cómo me siento. Siempre me hace falta y siempre la recuerdo y mucho de lo que hago en esta temporada, lo hago pensando en ella. Poner un arbolito, comprar nochebuenas, pensar en los demás y sobte todo, mirar al cielo y buscar las estrellas y saber que en una, está ella.

martes, 11 de diciembre de 2007

Manos que tomar.


El fin de semana pasado viajé a Villahermosa y me encontré con muchos rostros que buscaban el mío, muchas manos que querían alcanzar las mías y muchas historias que necesitaban ser contadas...a mí. Me olvidé de mis preocupaciones de salud, familiares y de trabajo. Aprendí que lo mío tiene una dimensión frente a otros sufrimientos. Aprendí que mis palabras ofrecen consuelo y aliento; que otras personas necesitaban escucharlas, que otras personas pudieron tomar mi mano y apoyarse y que el trabajo que iniciamos Galaxia y yo de Intervención en Crisis como un proyecto, pudo tomar forma y trascender.